Los pronósticos del comportamiento de la economía mexicana se vuelven cada día más pesimistas, mientras el gobierno federal busca mantener un discurso donde lo peor ya pasó y está todo bajo control.
Nuevamente la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) advirtió sobre el incremento del desempleo en los meses siguientes, ante la fuerte caída del nivel de actividad económica.
La estimación de la OCDE es una caída del 8 por ciento; se constituye así en el pronóstico más negativo de los existentes hasta el momento, ya que el Banco Mundial había estimado una caída del 5.8 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), mientras que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público ubicaba la pérdida de actividad en 5.5 por ciento. Lo anterior tiene y tendrá efectos directos sobre el nivel de empleo. Según cifras de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo que levanta el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) en el país, la tasa de desocupación a nivel nacional fue en mayo de 5.31 por ciento de la Población Económicamente Activa, porcentaje superior al que se registró en el quinto mes de 2008, cuando se situó en 3.24 por ciento.
La información preliminar de la encuesta difundida por Inegi señala que la población subocupada, esto es, la que declaró tener necesidad y disponibilidad para trabajar más horas, representó 12.5 por ciento de la PEA y 13.2 ciento de la población ocupada. Estas proporciones son más altas que las del mismo mes de un año antes, cuando se ubicaron en 6.3 por ciento y 6.5 por ciento.
El incremento suscitado en la población subocupada en los dos últimos meses refleja el impacto que tuvieron sobre la población ocupada los paros técnicos en los que han incurrido las empresas dada la situación económica, y según el Inegi las medidas tomadas para controlar el brote de Influenza AH1N1 en la última semana de abril y los primeros días de mayo, que paralizó una parte del país.
Podríamos decir que los efectos sobre el turismo y el empleo se dejarán ver en los próximos levantamientos de información. Pero además si el pronóstico más acertivo es el de la OCDE, la tasa de desempleo caerá a más del 7 por ciento, lo cual es un escenario sumamente grave, ante la fuerte descomposición social que ya existe.
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