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Artículo de Sergio Cortés Sánchez

Artículo de Sergio Cortés Sánchez

 CARPETA 

La campaña en los medios

 
 
ENCUESTAS
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    SERGIO CORTÉS

    La televisión es el principal medio de comunicación a través del cual nos informamos; lo que no es trasmitido por ella prácticamente no existe; bastante lejos está la radio y los impresos; el internet, que es usado por uno de cada cuatro ciudadanos, apenas despega como otra fuente de información política. Otra cosa en la credibilidad en los medios de comunicación, la cual es inversamente proporcional a la audiencia: la televisión  registró 64 por ciento de penetración, y en credibilidad, 5.5 puntos (en escala del 1 al 10); la radio tuvo 18.9 por ciento y 6.2 puntos, respectivamente; los impresos, 11.1 por ciento y 5.8 puntos (6.4 puntos los periódicos y 5.2 puntos las revistas) respectivamente, y el internet registró 4.9 por ciento de penetración y 3.2 puntos de credibilidad.

    En el mes de agosto del año pasado hicimos una encuesta telefónica sobre la credibilidad en los noticieros trasmitidos en los medios de comunicación; las respuestas posibles eran mucha, algo, poco o nada; esas respuestas derivaron en una escala de credibilidad que va de 0 (nada de credibilidad)  a 10 (mucha credibilidad). El resultado de esa encuesta aplicada a ciudadanos radicados en el municipio de Puebla fue: en las noticias en los periódicos la calificación fue 4.8 puntos; en las noticias en la radio, 4.5 puntos; en las noticias en las revistas, 4.2 puntos, y en las noticias en la televisión, 3.9 puntos. Para ver el comportamiento de esas valoraciones entre los años 2006–2008 se construyó un Índice de Confianza donde los registros de 2007 y 2008 se comparan con 2006, que fue la base, si el índice es mayor a 100, hay más credibilidad y, si es menor, es lo inverso. En el año 2008 el indice de credibilidad en las noticias en las revistas fue de 94; en las noticias de los periódicos y la radio fue de 91 y en las noticias en la televisión fue de 86. 

    Uno de cada 10 ciudadanos menores a 30 años se informa por la internet y los que se informan  través de los impresos y la radio son los mayores a 29 años. Los promedios de edad y de escolaridad de los que se informan por la televisión fueron de 39 años y de 11 años de escolaridad (segundo de preparatoria); los que se informan por la radio, de 42 y 13 (primer año de licenciatura) respectivamente; los que lo hacen a través de impresos, de 41 y 15 (tercer año de licenciatura) respectivamente y,  los que lo hacen por internet, de 29 y 14 años (segundo año de licenciatura). Las amas de casa y los estudiantes prefieren la televisión para enterarse de las noticias; los desempleados y jubilados tienen como segunda opción la radio. Los ciudadanos que registran actitudes críticas hacia el IFE y mucho interés por la política acceden a las noticias por los impresos y la internet y los que tienen una actitud más favorable hacia el instituto electoral y desinterés por la política se enteran de las noticias por la televisión. Lo ciudadanos que votarán en blanco registran un acceso a los impresos y al internet mayor que aquellos que sufragarán por un partido y por identidades de partido, los perredistas tienen el mayor acceso a noticias a través de los impresos y el internet y los priistas, el menor acceso a noticias por esos medios. A mayor nivel de ingresos, mayor es el acceso a las noticias a través de los impresos y la internet y viceversa.

    Las televisoras de canal abierto, principalmente Televisa, son las generadoras de opinión y utilizan ese poder para cambiar la norma electoral federal en su beneficio. El voto de repudio hacia los partidos y las modificaciones a ley electoral federal promovido por Televisa está relacionado con los cambios a la norma electoral federal fechados el 12 de noviembre de 2007, que es cuando  se firmó el decreto que cambia el artículo 41 Constitucional; en él se consigna que “El Instituto Federal Electoral será autoridad única para la administración del tiempo que corresponda al Estado en radio y televisión destinado a sus propios fines y al ejercicio del derecho de los partidos políticos nacionales... Los partidos políticos en ningún momento podrán contratar o adquirir, por sí o por terceras personas, tiempos en cualquier modalidad de radio y televisión. Ninguna otra persona física o moral, sea a título propio o por cuenta de terceros, podrá contratar propaganda en radio y televisión dirigida a influir en las preferencias electorales de los ciudadanos, ni a favor o en contra de partidos políticos o de candidatos a cargos de elección popular” Televisa se ha opuesto a estas medidas, no obstante que el ejecutivo federal programó una partida especial de  mil 791 millones de pesos para gastos de comunicación de las dependencias federales a ejercer en el año 2009 y el 60 por ciento de dicho presupuesto ha sido para Televisa (Jenaro Villamil, “Por el poder político”, Proceso, 28/06/09).

    En procesos electorales, el IFE dispone del tiempo de Estado, que es de 48 minutos diarios en radio y en televisión; de este tiempo, el 85 por ciento es para los partidos y el 15 restante para el IFE. El tiempo de los partidos se divide de la siguiente manera: el 30 por ciento se asigna a partes iguales y el 70 por ciento se fija en función de los votos que cada partido tuvo en la última elección federal. Esto ha garantizado, que en este proceso, el tiempo en radio y televisión haya sido menos inequitativo que en los anteriores procesos: el PAN y el PRI disponen, cada uno, del 26 por ciento del total del tiempo que los noticieros de radio y televisión han dedicado a las campañas electorales entre el 3 de mayo y el 5 de junio; el tercero en votación de diputados federales, que fue el Partido de la Revolución Democrática, tiene un 20 por ciento de ese tiempo. En el municipio de Puebla, en la encuesta de la semana pasada, nueve de cada 10 ciudadanos han visto o escuchado mensajes políticos de todos los partidos políticos. En acceso a la televisión y la radio, en esta elección ha habido un trato más equitativo que en procesos electorales anteriores.

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