Artículo de Félix Fuentes

Félix Fuentes En la Línea 13 de agosto de 2009

Del “catarrito” al infierno; los dos discursos

Entre el “catarrito” del hacendario Agustín Carstens y el “shock” anunciado por él mismo se abrió un boquete financiero de 480 mil millones de pesos en este año, lo cual significa la cancelación de programas, peor desempleo y mucha más pobreza. O sea, el faltante de esa suma, equivalente a 4% del PIB, se debe a menores ventas de petróleo y al fracaso de la recaudación de impuestos, derivada ésta de la parálisis industrial y agropecuaria.   Falta lo peor. El secretario de Hacienda, Carstens, anunció otro faltante de 300 mil millones para 2010. Es decir, este y el próximo año se padecerá un déficit por 780 mil millones.   Al mismo tiempo, fecal se ufanó de evitar que fuese arrasado el empleo a causa de la crisis e insistió en la creación de 35 mil trabajos entre junio y julio. Pero la clase empresarial contabiliza 3 millones de mexicanos en brazos caídos en este año. ¿Dónde encajan los números de fecal?   Menos es creíble lo dicho por el secretario de Economía, Gerardo Ruiz Mateos (“secretarito”, le llaman en medios oficiales), quien “advierte signos de recuperación” y, a su juicio, el gobierno instrumentó acciones “para conservar un millón de empleos”. Este funcionario debiera ser examinado por un siquiatra hasta quitarle lo mentiroso. La gente está harta de falsedades.   En su exposición a senadores, Carstens anunció la cancelación de programas (¿cuáles?) y gastos “sin afectar los que se destinan a combatir la pobreza”. Otra mentira. Cada día hay más pobres por el desempleo y el incontenible aumento en alimentos básicos.   Por caridad de Dios, clama mucha gente, que los calderonistas se pongan esparadrapos en sus bocas y dejen de aturdir al pueblo con versiones disparatadas. Los conductores de noticiarios pagan las consecuencias porque los televidentes cambian de canal o apagan sus aparatos cuando comienzan las abracadabrantes entrevistas. ¿Qué novedades pueden ofrecer?   Si Carstens había expuesto un panorama tétrico ante los legisladores y la mala noticia circuló el martes pasado, después del mediodía, ¿Quién podía creer en la noche la versión sobre el empleo y presuntos visos de recuperación? Por supuesto, pasó por alto las causas. Debió decir que el turulato Vicente Fox entregó el petróleo a los adorados “gringos” de Carstens a razón de un millón 800 mil barriles por día. Quiso el primer Presidente panista, agotar yacimientos y dejar en la inopia a las nuevas generaciones.   Tampoco dijo que ni en el anterior ni en el actual sexenio se ha hecho nada por activar a industrias y producción alimentaria. Y debido al terror del narco, incontables empresarios han cerrado negocios y se han ido de México. ¿Es difícil entender esto?     A propósito de calderonistas. Al titular de Comunicaciones, Juan Molinar, lo rechazan los senadores del PRI como interlocutor federal mientras no aclare ante la PGR su responsabilidad en la subrogación de la guardería ABC de Hermosillo. Según dijo el senador Fernando Castro, la respuesta de Molinar en su comparecencia, frente a legisladores, fue calificada de cínica.